A diferencia de lo ocurrido en los últimos dos años, en los que solamente había circulación de Sars-Cov2, virus como la influenza, el sincicial o el adenovirus ya se encuentran en el ambiente desde febrero pasado. Las ex autoridades sanitarias decidieron adelantar las planificaciones y el proceso de vacunación, lo que se transforma en una nueva prueba a la red de salud -y a la población en general-, sobre el cuidado de cada uno de los ciudadanos y, en especial, de los grupos más vulnerables.
Por Natalio Rabinovich V. y Patricio Cofré A.
El 3 de marzo del 2020, Chile confirmó el primer caso de Covid-19, luego de algunos meses en los que este lado del mundo había sido testigo incrédulo de la situación sanitaria que había obligado a países a confinar estrictamente a grandes partes de su población o a sufrir los embates de las primeras olas de contagios que hacían tambalear sus sistemas de salud.
Han pasado dos años desde aquel complejo momento y la pandemia continúa con un alto número de enfermos y fallecidos luego de las olas de Delta y Ómicron. Pero, pese a que existen buenos antecedentes y un moderado optimismo sobre lo que ocurrirá con la pandemia en los próximos meses, este año se ha sumado un nuevo foco de preocupación. La mayoría de los virus estacionales han adelantado su presencia en nuestro entorno, generando la necesidad de poner en marcha de forma anticipada las planificaciones para el invierno y generar estrategias potentes para alcanzar a las poblaciones más vulnerables de forma rápida y efectiva ante este nuevo escenario.
La Dra. Ingrid Kremser, presidenta de la Agrupación de Médicos de Atención Primaria de Salud, lo dice de forma tajante: “hemos recibido casos y diagnósticos de influenza desde febrero, por lo menos. Eso no lo había visto, no me había tocado que en APS tuviéramos influenza en febrero, jamás”.
La expresidenta y miembro del Comité Asesor de Vacunas e Inmunizaciones del Ministerio de Salud, CAVEI, la Dra. Jeannette Dabanch, explica otra situación singular de los últimos años. “Los virus que tradicionalmente tienen una circulación, parten la segunda o tercera semana de mayo y nos acompañan hasta más o menos septiembre, son fundamentalmente influenza, parainfluenza, VRS y adenovirus. Estos disminuyeron en forma considerable o casi desaparecieron con la emergencia del Covid-19. Esta situación ocurrió en todo el mundo, pero este año ha sido diferente”.
Las primeras señales las dio el Ministerio de Salud en uno de los reportes de la pandemia, el 8 de febrero pasado. Durante el tradicional balance por COVID, la exsubsecretaria de Salud Pública, Dra. María Teresa Valenzuela, advertía que “se está pensando adelantar el Plan de Invierno… Ya tenemos circulación del virus influenza, del virus respiratorio sincicial, de adenovirus y de parainfluenza, cosa que no había sucedido los años anteriores 2020 y 2021”.
Finalmente, el calendario se adelantó alrededor de 45 días antes de lo habitual y al menos un mes antes que el año pasado. Así, la campaña de vacunación 2022 se inició el pasado 7 de marzo para el personal de salud y a partir del 16 de ese mes comenzó para el resto de grupos objetivos: personas de 65 años y más, enfermos crónicos, niños entre los 6 meses hasta quinto básico y mujeres embarazadas. El plazo es hasta el 16 de mayo, pero eso podría adelantarse en caso de lograr un 85% de cobertura. Entre los grupos a vacunar y que pueden presentar complicaciones graves en el caso de adquirir la enfermedad, están también enfermos crónicos desde los 11 a los 64 años con enfermedades pulmonares crónicas, neurológicas, renales, hepáticas y metabólicas. También para cardiopatías, hipertensión, enfermedades mentales graves, enfermedades autoinmunes como lupus, esclerodermia, inmunodeficiencias o algún cáncer en tratamiento.
El Secretario Nacional del Colegio Médico de Chile, Dr. José Miguel Bernucci, indica que “es muy importante que se concientice a toda la población de participar en la campaña de vacunación anti influenza. En el contexto pandémico es muy relevante tratar de controlar factores que puedan sumarse al Covid, partiendo por los equipos de salud, los niños menores de 10 años y los mayores de 75 años, y enfrentar de mejor forma el invierno que se avecina”.
Un desafío que se suma
El adelanto de la Campaña de Invierno pone un nuevo desafío al sistema sanitario. Hoy ya se encuentra en pleno desarrollo el programa para la segunda dosis de refuerzo, lo que se suma a los rezagados de las inoculaciones anteriores. Por eso, la Dra. Kremser hace un llamado de atención con respecto a la situación que han vivido los equipos de salud. “Desde que partió la pandemia ha sido un tremendo desafío la vacunación, ha sido intensa y ahora, además de sumar el calendario de vacunación normal, se suma la de la influenza. Se está ocupando mucho recurso humano para dar cumplimiento a esas campañas y hay que considerar el cansancio que traen los funcionarios, el agotamiento físico y mental, por estos dos años muy potentes para la APS”, asegura.
Por esa razón, precisa, “lo que más falta es inyectar recursos económicos que se vean traducidos en recursos humanos para APS. La atención primara debe ser mirada y valorada como lo que es y que no quede en el discurso. Nos dicen que somos la piedra angular, la puerta de entrada al sistema de salud, pero eso no se ha llevado a la práctica y no vemos reflejada esa mirada. Ojalá eso pueda ser cambiado, porque damos atención a la mayor parte de la población de Chile”.
La doctora Dabanch, además, advierte de una posible ‘fatiga’ que puede haber en la población, pero espera que no sea un problema en los próximos meses. “La campaña masiva de vacunación comenzó en febrero de 2020, en plena época de vacaciones, y a pesar de eso el resultado fue bastante bueno. Hoy puede haber ‘fatiga pandémica’, pero tenemos un país muy adherente a la vacunación que viene de hace muchísimos años y en la que hemos dado cuenta de que somos muy ordenados para seguir esos procesos”, aclara.
Uno de los focos en los que pone la preocupación la profesional del Hospital Clínico de la Universidad de Chile es en el Renovirus, que ha sido detectado en forma permanente desde el 2021. “Es preocupante, principalmente para los adultos, no es un virus que sea solamente un resfrío, también requiere hospitalización de pacientes”, complementa Dabanch.
La profesional también destaca la importancia de las mascarillas. “Nos preparamos bastante para la reducción de estos virus con las mascarillas y el distanciamiento físico y también con la vacunación contra la influenza, siendo la principal herramienta para combatirla. No sabemos cuál va a ser el comportamiento de estos virus, esperamos que se mantengan las medidas de autocuidado y que permanezca un control que es lo que hemos visto en los últimos años de los virus respiratorios, pero hay que insistir en la vacunación contra la influenza, porque es una medida demostrada que disminuye la mortalidad por todas las causas”, concluye Dabanch.
Dra. Ingrid Kremser, Presidenta Agrupación Médicos APS: “Hemos recibido casos y diagnósticos de influenza desde febrero, por lo menos. Eso no lo había visto, no me había tocado que en APS tuviéramos influenza en febrero, jamás”
Dra. Jeannette Dabach, Infectóloga Hospital Clínico U. de Chile: “Hoy puede haber ‘fatiga pandémica’, pero tenemos un país muy adherente a la vacunación que viene de hace muchísimos años y en la que hemos dado cuenta de que somos muy ordenados para seguir esos procesos”
Dr. José Miguel Bernucci, Secretario Nacional Colegio Médico: “En el contexto pandémico es muy relevante tratar de controlar factores que puedan sumarse al Covid y enfrentar de mejor forma el invierno que se avecina”