El viernes 20 de marzo del año en curso falleció el Dr. Manuel García de los Ríos Álvarez, reconocido médico y académico, profesor emérito de la Universidad de Chile, Maestro de la Medicina Interna chilena, Máster del American College of Physicians, Premio Nacional de Medicina, miembro de número de la Academia Chilena de Medicina; miembro honorario de Sociedades médicas de Colombia, Ecuador y Venezuela, Paraguay, Uruguay, Argentina, Costa Rica, etc.; son todos ¡rangos o distinciones a las que no se postula, lo postulan los pares o sus alumnos. Todos estos y seguramente otros más recibió Manuel García de los Ríos por haber hecho una notable contribución a la medicina, sea enseñándola o investigando en alguna de sus múltiples áreas, haciéndola llegar a los pacientes que son el fin preciso de la medicina y orientando su trabajo hacia la prevención de las enfermedades.
Fue miembro del Consejo asesor del Gobernador Chileno del American College of Physicians, del Directorio de la Sociedad Médica de Santiago, de la Sociedad Chilena de Endocrinología y Metabolismo que la presidió, de la Corporación Nacional de Certificación de Especialidades Médicas, del Comité Ejecutivo de la Agencia Acreditadora de Programas y Centros Formadores de Especialistas Médicos (APICE), miembro (1983-1985) y Chairman de la Región Centro y Sudamericana de la “International Diabetes Federation”, Presidente de la Asociación Latinoamericana de Diabetes. En suma, lideró en toda organización a su alcance, orientada al desarrollo y control de calidad del trabajo médico.
Recibió por su trabajo profesional y su labor académica numerosos reconocimientos: Premio Ramón Corvalán Melgarejo de la Sociedad Medica de Santiago para el mejor trabajo en Salud Pública (1956), Premio Anual de la Sociedad por trabajos relacionados con Diabetes y anticuerpos antivirales (1995) y con factores hereditarios, Latinamerican Hagedorn Gold Medal de la Asociación Latinoamericano de Diabetes (1995), Profesor emérito y Distinción Medalla Juvenal Hernández (2015) de la Universidad de Chile, Premio Nacional de Medicina (2016).
Fue un médico internista, que trabajó y se desempeñó con brillo excepcional por más de sesenta años dando gran parte de su jornada al ámbito hospitalario y universitario en una de las zonas ¡más pobres de nuestra ciudad. Vivió el trabajo con pocos recursos y ningún confort y sirviendo a personas de bajo nivel económico, social y cultural. En ese ambiente, apareció cual faro iluminador el Centro de Diabetes del Hospital San Juan de Dios, que lideró por muchos años y que desde hace ya algunos años se llama Manuel García de los Ríos. En él se formaron especialistas para todos los rincones de Chile y de muchos países latinoamericanos, publicó sus experiencias en forma de trabajos científicos y de capítulos de libros, divulgó guías clínicas, editó un excelente texto sobre diabetes del cual se agotaron dos ediciones. Dentro de Chile y en cualquier lugar de América hay médicos que se formaron o aprendieron de Manuel.
Viajero incansable por vacaciones, razones académicas o para aprovechar millas acumuladas. Cualquier día al encontrarse con él, una atinada forma de saludarlo era preguntarle “¿Cómo te fue?” o “¿Cuándo te vas?”.
Quienes lo conocíamos bien no sólo valorábamos al médico o al diabetólogo brillante, sino también al personaje muy inteligente, amistoso siempre de buen humor y ágil conversador, bondadoso, sano de espíritu, con mucho sentido común y buen criterio, abierto para mostrar qué pensaba y qué sentía ¡Cómo no agradecer y solidarizar con María Isabel, los hijos, nietos y bisnietos de los García de los Ríos Court por haber acompañado a Manuel en esta carrera y haberlo compartido con tantos médicos, amigos y pacientes.
Manuel acaba de emprender su último viaje. Esta vez tampoco postuló, al contrario, por años sorteó una y otra grave enfermedad. Es duro y difícil, pensar en la Academia Chilena de Medicina y en el Hospital San Juan de Dios de Santiago sin Manuel García de los Ríos.
Dr. Rodolfo Armas Merino
Presidente Academia Chilena de medicina